En el puente de la
Constitución e Inmaculada me fui al camping llamado Balería en el Pirineo de
Huesca con toda la familia.
El sábado nos levantamos
muy temprano para empezar el fin de semana, puestas las maletas en el coche en
peco la excursión.
Ya en el camping nos
dirigimos hacia el bungalow, para deshacer las maletas y descansar un poco
porque teníamos muy sueño. Cuando estaba colocado todo en su lugar, yo me fui a
descubrir los rincones del camping. Encontré: una pista de básquet, de fútbol,
una mesa de ping-pong. Muy cerca se encontraba un río muy largo y con agua estaba helada y la agua era muy clara y en un
rincón había para hacer barbacoas.
El domingo por la mañana queríamos
ir a esquiar, pero en las pistas había poca nieve y no se podía esquiar. Mi
hermano se fue a esquiar a las pistas de Baqueira con sus amigos de Albesa porque
allí sí que había nieve.
Con mis padres fuimos a
hacer una excursión por Vielha. Por la
tarde fuimos a patinar sobre hielo, al principio me caí algunas veces, pero
luego fue genial. Por la noche mi padre
se fue porque tenía el día siguiente tenia de trabajar.
Nosotros aprovechamos
para descansar un rato y hacer los deberes del colegio.
El lunes a la hora de
comer mí padre ya había regresado al camping. Para comer una gran barbacoa.
El martes último día, toca
regresar. Antes hicimos una última excursión
al Balneario de Caldes de Boí. Después de comer, volvimos a casa.